Hoy vamos a hablar del empalme en el cine.
Por definición, por lógica, podemos intuir lo que es el empalme en el montaje audiovisual.
Pues bien, para dejarlo más claro vamos a definirlo y poner algún que otro ejemplo a seguir y un ejemplo para olvidar.
¿Qué es?
Unión de dos fragmentos o planos de película que se realizan en el montaje en moviola. La moviola es el aparato que permite una filmación o vídeo a diferente velocidad, secuencia a secuencia o para atrás, para efectuar las operaciones de montaje o con otros fines.
El empalme es el primer tipo de montaje de planos que se utilizó para montar las escenas que se suceden, una detrás de otra, dándole coherencia y sentido a una filmación. Fue Porter quién descrubrío la importancia del montaje en cine sobrepasando la forma teatral de Meliés y dotándolo del principio del montaje. Descubrió así la posibilidad de representar dos o más “acciones paralelas”, comenzando a utilizar su técnica hacia 1906.
Antes del uso del empalme se realizaban encuadres aislados, es decir, pieza incompleta de la acción y unidad sobre la que debe construirse el film.
Sería Griffith quién posteriormente estudiara el montaje de las secuencias y de los planos dentro de las secuencias. Basó sus estudios en la literatura de Dickens, aportando a su obra y al cine universal la utilización de un montaje elaborado de múltiples posibilidades y utilizando por primera vez el montaje por atracciones, el montaje de las “retroacciones”, “la vuelta atrás” y el “flash back”.
El montaje, apoyado por estrategias específicas de la fotografía y la puesta en escena, se utilizó para asegurar la continuidad narrativa y, en la actualidad, se sigue utilizando.
No hay comentarios:
Publicar un comentario